Los voltajes más altos son ventajosos para los vehículos eléctricos (EV) por las siguientes razones:
① Eficiencia: un voltaje más alto permite una transmisión de energía más eficiente.
② Reducir la generación de calor: una corriente más baja se asocia con un voltaje más alto, lo que puede reducir el calor generado en los componentes eléctricos y el cableado. Esto es importante tanto para la eficiencia energética como para la longevidad de los componentes.
③ Cables más delgados: a voltajes más altos, se pueden usar cables más delgados para transmitir la misma potencia, reduciendo el peso y el costo del sistema eléctrico. Para un nivel de potencia determinado a un voltaje más bajo, se necesita un cable más grueso para manejar la corriente más alta, y un cable más grueso es más pesado y más caro.
④ Componentes más pequeños y livianos: los sistemas de mayor voltaje pueden usar componentes más pequeños y livianos para lograr la misma potencia de salida. Esto beneficia el peso y el tamaño total del vehículo, ayudando a mejorar la eficiencia y el rendimiento.
⑤ Eficiencia de frenado regenerativo: el frenado regenerativo es una característica común de muchos vehículos eléctricos y es más eficiente con voltajes más altos. Durante el frenado regenerativo, el motor eléctrico actúa como generador, convirtiendo la energía cinética en energía eléctrica. Un voltaje más alto permite una recuperación de energía más eficiente durante el frenado.
⑥ Eficiencia de carga: un voltaje más alto también favorece una carga rápida. Muchas estaciones de carga rápida de alta potencia funcionan a voltajes más altos para proporcionar más energía a los vehículos eléctricos en menos tiempo.
⑦ Rendimiento del sistema de energía: un sistema de mayor voltaje puede proporcionar más potencia al motor eléctrico, ayudando así a mejorar la aceleración y el rendimiento general del vehículo.